Neurorehabilitación pediátrica
¿Qué es la neurorehabilitación pediátrica?
La neurorrehabilitación pediátrica es un campo de las ciencias de la salud cuyo objetivo es reducir la discapacidad y preservar la función física, cognitiva, social y emocional del niño con afectación neurológica.
La neurorrehabilitación pediátrica se enfoca en el tratamiento integral de diversas condiciones neurológicas que afectan a los niños, tales como lesiones cerebrales traumáticas, parálisis cerebral, trastornos de movimiento, trastornos del desarrollo y enfermedades neuromusculares, entre otras.
Su principal objetivo es mejorar la calidad de vida de los niños, fomentando su independencia y participación plena en las actividades diarias.
Por ello, en NeuroPed nos centramos en buscar el máximo potencial del niño a largo plazo.
La Neurorrehabilitación se basa en la neurociencia, en el ámbito de la pediatría contamos con la ventaja de la enorme plasticidad del sistema nervioso de los niños. y sus principios de actuación están fundamentados en la evidencia científica de la eficacia de los tratamientos.
¿Qué ofrece la neurorrehabilitación pediátrica de NeuroPed?
Nuestro equipo de profesionales formados en neurorrehabilitación realiza un tratamiento interdisciplinar y personalizado para cada niño y sus necesidades
- Valoración global del niño y su familia.
- Detección necesidades específicas.
- Tratamiento personalizado.
- Enfoque centrado en la familia y el niño.
- Tendrán una visión única del niño. Esto es debido a que se realiza una evaluación exhaustiva y personalizada para comprender plenamente las necesidades y potenciales de cada niño.
- Diseñarán de forma coordinada el mejor tratamiento para vuestro hijo. Para ello, trabajan de manera colaborativa y coordinada para comprender plenamente las necesidades del niño y diseñar un plan de tratamiento personalizado.
Beneficios de la neurorrehabilitación pediátrica
Te contamos cuáles son los beneficios de una correcta neurorrehabilitación pediátrica, para que puedas estar informada antes de iniciar el proceso.
Mejora de la función motora
La neurorrehabilitación pediátrica permite desarrollar habilidades motoras necesarias para realizar actividades cotidianas, moverse de manera independiente y participar en juegos y actividades recreativas.
Promoción del desarrollo cognitivo:
A través de intervenciones terapéuticas personalizadas, la neurorrehabilitación pediátrica estimula el desarrollo cognitivo de los niños. Se trabajan habilidades como la memoria, la atención, el razonamiento y el procesamiento de información, fomentando su capacidad de aprendizaje y su rendimiento académico.
Apoyo en el desarrollo del lenguaje y la comunicación:
Muchos niños que requieren neurorrehabilitación pediátrica enfrentan dificultades en el habla y la comunicación. Los especialistas en lenguaje y comunicación trabajan para mejorar la expresión verbal, la comprensión auditiva y el uso de sistemas alternativos de comunicación, brindando a los niños la capacidad de comunicarse de manera efectiva.
Fomento de habilidades sociales y emocionales:
La neurorrehabilitación pediátrica también se enfoca en desarrollar habilidades sociales y emocionales en los niños. Se promueve la interacción social, el reconocimiento de emociones, la empatía y el manejo adecuado de las emociones, permitiendo a los niños establecer relaciones positivas y desarrollar una buena autoestima.
Mejora de la calidad de vida:
El objetivo principal de la neurorrehabilitación pediátrica es mejorar la calidad de vida de los niños. Al ayudarles a desarrollar habilidades funcionales, independencia y participación activa en la sociedad, se busca que los niños tengan una vida plena y satisfactoria, maximizando su potencial y su bienestar general.
Promoción de la autonomía y la independencia:
La neurorrehabilitación pediátrica se centra en ayudar a los niños a desarrollar habilidades necesaria s para llevar a cabo actividades diarias de manera independiente. Esto incluye tareas como el autocuidado, la alimentación, el vestirse y el manejo de tareas escolares. Al fomentar la autonomía, se les brinda a los niños la oportunidad de ser más independientes y participar activamente en su entorno, lo que mejora su autoconfianza y autoestima.
Especialidades de la neurorrehabilitación pediátrica
La neurorehabilitación pediátrica desempeña un papel fundamental en el apoyo a niños y sus familias a lo largo de su viaje de recuperación y desarrollo. A continuación, mostramos las especialidades en las que NeuroPed se especializa:
La neurorrehabilitación mejora la capacidad motora, esto es debido a que la parálisis cerebral puede afectar el control y la coordinación de los movimientos y la neurorrehabilitación pediátrica se centra en fortalecer los músculos, mejorar la coordinación y desarrollar habilidades motoras específicas. Otro punto a destacar es el fomento de la comunicación y lenguaje ya que se trabaja en el desarrollo de habilidades de comunicación, ya sea mediante el uso del lenguaje oral, alternativo o el apoyo de dispositivos. Esto facilita la interacción y la expresión de ideas y emociones
Además, estimula el desarrollo cognitivo a través de actividades y ejercicios específicos. De esta manera se promueve el desarrollo de habilidades cognitivas como la atención, la memoria, el razonamiento y el procesamiento de información.
Por otro lado, la parálisis cerebral puede tener un impacto significativo en el bienestar emocional y las habilidades sociales de los niños, por lo que la neurorrehabilitación pediátrica brinda apoyo emocional y social, ayudando a los niños a desarrollar habilidades para manejar el estrés, fortalecer su autoestima y fomentar relaciones interpersonales positivas, así como la mejora de calidad de vida
La neurorrehabilitación pediátrica mejora la función motora ya que se enfoca en fortalecer los músculos, mejorar la coordinación y desarrollar habilidades motoras específicas. Además, gracias a las actividades y ejercicios adaptados se mejora el desarrollo cognitivo como, por ejemplo, la atención, la memoria, el razonamiento y el procesamiento de información.
Otro punto a destacar es el desarrollo de habilidades de comunicación, ya sea a través del habla, la comunicación alternativa o el uso de dispositivos de asistencia. Esto facilita la interacción y la expresión de ideas y emociones. Como consecuencia, el lado más emocional y social se ve beneficiado, así como las relaciones interpersonales.
Por otro lado, la neurorrehabilitación pediátrica busca mejorar la calidad de vida de los niños con síndromes. Al fortalecer las habilidades físicas, cognitivas y emocionales, se les proporciona a los niños las herramientas necesarias para maximizar su autonomía, participación y bienestar en todas las áreas de su vida.
La neurorrehabilitación pediátrica se enfoca en la restauración y mejora de estas funciones a través de terapias específicas, ejercicios y técnicas adaptadas a las necesidades individuales del niño. De la misma manera, estimula el aprendizaje ayudando a la memoria, la atención y el procesamiento de información.
Los tratamientos contra el cáncer y los tumores cerebrales pueden causar dolor y fatiga en el niño. Por ello, gracias a este tratamiento se puede mejorar la resistencia y reducir la fatiga, ayudando al niño a recuperar su energía y bienestar general.
Además, también nos centramos en la reintegración social mediante terapias ocupacionales y actividades recreativas adaptadas, se promueve la participación activa del niño en sus actividades cotidianas, escuela y entorno social, fomentando su autonomía y sentido de pertenencia.
Los niños prematuros suelen tener un mayor riesgo de presentar retrasos en el desarrollo neurológico debido a su nacimiento temprano. La neurorrehabilitación pediátrica proporciona una estimulación temprana y específica para promover el desarrollo cerebral adecuado. Esto incluye actividades diseñadas para mejorar la función motora, cognitiva y sensorial.
Además, favorece la estimulación cognitiva utilizando técnicas y actividades para mejorar la atención, la memoria, el lenguaje y las habilidades de resolución de problemas. Por otro lado, nos enfocamos en el desarrollo de habilidades sociales y emocionales. Los terapeutas trabajan en la interacción social, la comunicación, la regulación emocional y la empatía. Estas habilidades son fundamentales para que los niños puedan relacionarse de manera efectiva con su entorno y establecer vínculos saludables con los demás.
La neurorrehabilitación pediátrica se enfoca en la recuperación y mejora de las funciones afectadas por el daño cerebral adquirido. A través de terapias específicas, se trabajan áreas como el lenguaje, la motricidad, la cognición, la atención y otras habilidades necesarias para el desarrollo y la participación en actividades diarias.
Además, cuando ciertas funciones no se pueden restaurar por completo, la neurorrehabilitación ayuda a los niños a adaptarse y compensar dichas limitaciones. Como consecuencia, se mejora la calidad de vida, ya que se trabaja en la restauración de funciones y habilidades, se promueve la autonomía, la confianza en sí mismos y la integración social, permitiéndoles participar más plenamente en la escuela o en casa.
La neurorrehabilitación pediátrica proporciona una estimulación temprana y específica que promueve el desarrollo cerebral en niños con daño cerebral adquirido. A través de actividades estructuradas y terapias especializadas, se fomenta la plasticidad cerebral y se facilita la creación de nuevas conexiones neuronales.
La neurorrehabilitación pediátrica es beneficiosa en el caso del daño cerebral congénito, ya que proporciona estimulación temprana y específica, mejora funciones y habilidades, promueve la adaptación y compensación, brinda apoyo a las familias y mejora la calidad de vida. Esta intervención integral ayuda a los niños a alcanzar su máximo potencial y a desarrollar una vida lo más independiente y significativa posible.
La neurorehabilitación pediátrica desempeña un papel crucial en el manejo de las enfermedades raras en los niños. Proporciona mejoras en la calidad de vida, el mantenimiento y promoción de habilidades, el manejo de síntomas y complicaciones, el apoyo emocional y psicológico, y el apoyo a las familias. Este enfoque integral ayuda a los niños y sus familias a enfrentar los desafíos de las enfermedades raras de manera más efectiva y a promover su bienestar general.